Los investigadores de la Universidad Purdue han desarrollado una aleación de metal que puede separar el agua salada en hidrógeno y oxígeno para crear un combustible hidrógeno y agua fresca al mismo tiempo.El vapor puede ser condensado para obtener un agua bebible esterilizada, mientras el gas es usado para generar electricidad. La aleación está hecha principalmente de aluminio, aunque también tiene galio, indio y estaño. Cuando es sumergida en agua causa una reacción espontánea que hace que el agua hierva, liberando así vapor y gas hidrógeno.
El proceso puede continuar hasta que el aluminio se gaste, lo cual deja como resultado un residuo no tóxico que es hidróxido de aluminio.
Puede funcionar con agua sucia e incluso con agua salada. Lo primero que los investigadores buscan crear es un purificador y generador de bajo costo que pueda ser lanzado por aire hacia aldeas remotas ubicadas en África.
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